Según los datos de la Sociedad Española de Neurología, entre un 20 y un 48% de la población adulta española tiene dificultades para iniciar o mantener el sueño. Entre la población infantil estos problemas afectan a un 20 o un 25% de los niños. Todos ellos ven, de un modo u otro, comprometida su calidad de vida. Y es que dormir es necesario para recuperar el equilibrio físico y mental. Una de las claves para un sueño reparador es la melatonina.
¿QUÉ ES LA MELATONINA?
La melatonina es una hormona producida de forma natural en nuestro cuerpo. Principalmente se origina en nuestro cerebro de manera rítmica. Cuando llega la noche y nuestros ojos dejan de captar la luz del día, se envía una señal nerviosa que llega a la glándula pineal donde se inicia la transformación de la serotonina en melatonina. Cuando se alcanzan unos niveles adecuados los diferentes sistemas de nuestro cuerpo entienden que es hora de dormir.
Además de en el cerebro, nuestro cuerpo también genera la llamada melatonina extrapineal que se produce en las células de otros órganos y tejidos con el objetivo de protegerlas de posibles daños.
¿QUÉ FUNCIONES DESEMPEÑA LA MELATONINA?
Regula el ciclo sueño-vigilia y facilita la conciliación del sueño. La melatonina actúa sobre la regulación de nuestro reloj biológico que es el encargado de que marcar cuando nos dormimos y cuando despertamos. También interviene en nuestra tensión arterial y nuestra temperatura corporal.
Reduce los efectos del jet-lag. Lo que conocemos como jet-lag no es más que la alteración de nuestro reloj biológico cuando volamos atravesando varios husos horarios. La suplementación con melatonina ayuda a “resetear” el reloj favoreciendo la sincronización de los ritmos circadianos con el nuevo horario.
Reduce el estrés oxidativo. La melatonina en un potente antioxidante. Actúa neutralizando los radicales libres y potenciando la acción de otros antioxidantes como las vitaminas C y E. Tiene también capacidad antiinflamatoria y protege del envejecimiento.
Ayuda al sistema inmunitario. La melatonina interviene en la regulación de su actividad evitando una respuesta excesiva del mismo.
MELATONINA A LO LARGO DE LA VIDA
Como en el caso de otras muchas hormonas, la producción de melatonina en nuestro cuerpo desciende con la edad.
Según el Instituto Internacional de la Melatonina de la Universidad de Granada, “el recién nacido no tiene ritmo de melatonina, aunque su glándula pineal puede producirla tónicamente porque la ausencia de luz aumenta su producción. La producción y secreción rítmica de melatonina se mantiene hasta la pubertad, cuando disminuye de manera notable, para estabilizarse de nuevo hasta los 35-40 años. A partir de aquí, la producción de melatonina decae y hacia los 55-65 años el pico nocturno de melatonina se ha reducido en un 40%, con las consiguientes consecuencias para la regulación de nuestros ritmos circadianos.”
Los suplementos a base de melatonina son una muy buena solución cuando, por la causa que sea, nuestro reloj biológico se altera. Además, como la melatonina no se acumula en el organismo y, en general, es bien tolerada y se puede usar a cualquier edad, incluso en niños.
BENEFICIOS DE UN BUEN DESCANSO
Un sueño reparador está cargado de ventajas para nuestra salud física y emocional. Dormir bien mejora nuestra calidad de vida.
- Ayuda a reforzar el sistema inmunitario.
- Reduce el estrés y la irritabilidad.
- Aumenta la agilidad mental. Te ayuda a estar más creativo.
- La vista descansa y se regenera.
- Los músculos y articulaciones liberan la tensión acumulada durante la jornada.
- Beneficia el sistema cardiovascular.
- Es un buen tratamiento de belleza. Mientras duermes las células de la piel se renuevan.
En la infancia, es sueño:
- Favorece los procesos de atención y memoria.
- Ayuda a consolidar lo aprendido durante al día.
- Durante la fase de sueño profundo aumenta la secreción de la hormona del crecimiento.